Vida normal

Cuando el lobo hizo acto de presencia, o más bien, cuando fue sorprendido en pleno ataque a mi cuerpo, la nota de consolación decía "tranquila, harás vida normal".
De eso hace 2 años y un par de semanas, lo de tranquila lo he cumplido a ratos; lo de vida normal...ejem ejem, que se lo digan a mis amig@s cada vez que reciben un sms o una llamada para ser avisados de que esta vez no podré quedar porque algo le pasa a mi cuerpo.
Ahora estoy de baja, se veía venir, aguanté lo que pude, pero al final, jaque! que no mate eh! Y me aburro y me desespero a partes iguales. Soy una pirata con la pata chula pero no de palo y sin parche en el ojo. Juguemos a subir dosis de veneno, quizás mejore, pero nada es seguro con este animal de mirada penetrante.
De momento, mi "vida normal" se ha parado, mis pacientes esperan, mis atracos también y mis planes de corto-medio plazo se tambalean, espero que tengan el mismo diseño de los "tentetiesos" y se mantengan en posición vertical.
Sigo intentando generar más paciencia, porque encima, ríete tú de los círculos viciosos, los nervios no ayudan a mejorar el estado físico, sino más bien lo empeoran, y de qué manera señores! así que, ahora toca respirar, pausadamente y confiar en que esto pase pronto. Sé que lo hará, no queda otra.

Retrospección

Mientras escribo suena de fondo una canción de "The last shadow puppets", alguien me la descubrió y desde entonces está ligada a su recuerdo, y a toda aquella época.

Hoy he estado comiendo en un teleclub de esos tan famosos en mi isla, y no podía dejar de pensar en detalles y en personas. Hay dos que han marcado en mi última época y a las que de alguna manera les debo mucho. La relación con ellas, que comenzó sienda paralela luego tomó diferentes derroteros, mientras en una no paraban de surgir baches, y continuos cambios de desnivel, la otra se caracterizó por la serenidad, y la fluidez...

Desde la distancia todo se ve diferente, lo malo no es tan malo, y lo bueno es incluso mejor (algún día escribiré sobre esto porque da para rato ;) )

Añoro pasar tiempo con ellos, los jueves de cine, los recreos de sandwich de paté y café "aguachiento" y los desencuentros puestos en escena para ser entendidos.

Ahora escribo por ellos, porque sé que donde estén, se acordarán de mí, como yo de ellos y de alguna manera me buscarán, así que aquí estoy, para ustedes, esperándolos. Quizás algún día los tres, con nuestras propias vivencias podamos escribir el guión de alguna de esas películas "freaks" con banda sonora a cargo de "The last shadow puppets".

Un besito a los dos, uno para cada eh!