Pero un día se encontraron como trenes de ida y vuelta en el andén...y así fue, al cabo de trece largos años, en los que se forjó su historia se encontraron nuevamente, siendo los mismos que en aquel entonces, pero recubiertos de otra piel, otros pensamientos, otros sentimientos, más maduros, más llenos, más completos quizás, o más perdidos que la primera vez, quién sabe, se encontraron al fin piel con piel, sintiendo de cerca el aroma del otro, el latir de su corazón, la respiración agitada o entrecortada, los susurros, las miradas llenas de emoción y las sonrisas cargadas de nervios por lo nuevo de la situación, por la sorpresa de que esta vez sí era posible. No sabían si durante todo ese tiempo estuvieron esperando, no les parecía que así fuera, cada uno había hecho su vida, a su manera, pero siempre habían dejado en un rincón de la memoria todos los deseos no cumplidos, marcados a fuego lento, llegando a pensar que eran inalcanzables, una utopía, la más bella y romántica de sus vidas. Seguro que en infinidad de ocasiones se habían imaginado junto al otro, como lo estaban ahora, la vida misma les había brindado varias veces la oportunidad pero sus partes racionales siempre pudieron más, desbaratando los planes de la pasión. Pero todo llega, y como trenes de ida y vuelta se encontraron, se abrazaron, se besaron y todo empezó de nuevo...otra vez, aunque sólo fuera por ese instante, fueron libres, se soñaron despiertos y supieron que lo que tantas veces imaginaron ese día se hacía realidad.
lunes, 23 de febrero de 2009
Se encontraron
Pero un día se encontraron como trenes de ida y vuelta en el andén...y así fue, al cabo de trece largos años, en los que se forjó su historia se encontraron nuevamente, siendo los mismos que en aquel entonces, pero recubiertos de otra piel, otros pensamientos, otros sentimientos, más maduros, más llenos, más completos quizás, o más perdidos que la primera vez, quién sabe, se encontraron al fin piel con piel, sintiendo de cerca el aroma del otro, el latir de su corazón, la respiración agitada o entrecortada, los susurros, las miradas llenas de emoción y las sonrisas cargadas de nervios por lo nuevo de la situación, por la sorpresa de que esta vez sí era posible. No sabían si durante todo ese tiempo estuvieron esperando, no les parecía que así fuera, cada uno había hecho su vida, a su manera, pero siempre habían dejado en un rincón de la memoria todos los deseos no cumplidos, marcados a fuego lento, llegando a pensar que eran inalcanzables, una utopía, la más bella y romántica de sus vidas. Seguro que en infinidad de ocasiones se habían imaginado junto al otro, como lo estaban ahora, la vida misma les había brindado varias veces la oportunidad pero sus partes racionales siempre pudieron más, desbaratando los planes de la pasión. Pero todo llega, y como trenes de ida y vuelta se encontraron, se abrazaron, se besaron y todo empezó de nuevo...otra vez, aunque sólo fuera por ese instante, fueron libres, se soñaron despiertos y supieron que lo que tantas veces imaginaron ese día se hacía realidad.
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1 comentario:
:-)...............;-)...................;-P
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